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Los Tres Errores Más Comunes que Cometen los Propietarios al Vender su Vivienda

Vender una vivienda es un proceso emocionante, pero también lleno de desafíos. Como propietario, es normal que quieras obtener el mejor precio por tu propiedad y que la venta sea rápida y sin complicaciones. Sin embargo, muchas veces, por falta de experiencia o de asesoramiento adecuado, se cometen errores que pueden retrasar la venta o reducir el precio final. En esta entrada de blog, te explico los tres errores más comunes que suelen cometer los propietarios al vender su vivienda y cómo puedes evitarlos para lograr una transacción exitosa.

1. Fijar un Precio Incorrecto

Uno de los errores más comunes y perjudiciales es fijar un precio incorrecto, generalmente por encima del valor real de mercado. Es comprensible que, como propietario, quieras obtener el mayor beneficio posible, pero un precio demasiado alto puede ahuyentar a los compradores potenciales. Los primeros días de la venta son críticos: la propiedad recibe la mayor atención en este período, y si el precio es poco realista, muchos interesados no se molestarán en hacer una oferta.

Además, una vivienda sobrevalorada puede quedarse más tiempo en el mercado, lo que genera la percepción de que algo está mal con ella, lo que eventualmente te obligará a bajar el precio, a veces más de lo que habrías aceptado inicialmente. En el lado opuesto, poner un precio demasiado bajo también es un error, ya que podrías dejar dinero sobre la mesa.

Solución: Para evitar este error, es fundamental realizar una correcta valoración de la vivienda. Puedes basarte en las características de la propiedad, las transacciones recientes en la zona y las tendencias del mercado. Como perito judicial en valoraciones, te recomiendo que siempre busques asesoramiento de un experto que conozca bien tu mercado local. Un agente inmobiliario con experiencia te ayudará a fijar un precio adecuado, competitivo y realista para atraer el mayor número de compradores.

2. Descuidar la Presentación de la Vivienda

El segundo error más común es no preparar adecuadamente la vivienda para las visitas. Muchos propietarios subestiman la importancia de la primera impresión y muestran sus casas tal cual están, sin pensar en lo que los posibles compradores verán al entrar. Una casa desordenada, con mal mantenimiento o con una decoración demasiado personal puede desmotivar a los compradores y dificultar la venta.

Incluso los pequeños detalles como un jardín sin cuidar, una pintura descascarada o habitaciones desordenadas pueden restar valor a la vivienda. Los compradores buscan espacios limpios, bien iluminados y que les permitan imaginarse viviendo allí, por lo que la presentación es clave para despertar interés y generar ofertas.

Solución: Para maximizar las posibilidades de una venta exitosa, invierte tiempo en mejorar la presentación de tu vivienda. Ordena, limpia a fondo y despersonaliza el espacio (retira fotos familiares o elementos decorativos muy particulares). Si es necesario, considera realizar pequeñas reformas o tareas de mantenimiento que puedan aumentar el atractivo de la casa. Si no tienes claro por dónde empezar, el homestaging es una excelente opción: esta técnica consiste en redecorar la vivienda para hacerla más atractiva y funcional a los ojos de los posibles compradores.

3. No Contar con Asesoramiento Profesional

Intentar vender una vivienda por cuenta propia sin el respaldo de un profesional inmobiliario es otro error común. Muchos propietarios creen que ahorrarán dinero al no pagar comisiones, pero esto puede acabar costándoles más a largo plazo. La venta de una vivienda es un proceso complejo que incluye múltiples pasos: la valoración de la propiedad, la promoción, la negociación, la gestión de visitas y la redacción de contratos. Si no cuentas con la experiencia necesaria, puedes cometer errores legales o financieros que retrasen la venta o incluso la hagan fracasar.

Además, los agentes inmobiliarios profesionales tienen acceso a recursos y redes de contactos que un particular no posee. Saben cómo posicionar la propiedad en el mercado, conocen las mejores plataformas de publicidad y tienen la capacidad de negociar mejores ofertas.

Solución: Aunque te resulte tentador vender tu vivienda por tu cuenta, mi recomendación es que cuentes con el apoyo de un agente inmobiliario profesional. Un agente con experiencia te ayudará a evitar errores, te proporcionará una valoración objetiva del precio, y se encargará de todo el proceso, desde la promoción hasta la firma final. De esta forma, maximizarás tus posibilidades de vender más rápido y al mejor precio. Y si además necesitas una valoración rigurosa y objetiva, como perito judicial en valoraciones, te ofrezco mis servicios para asegurarte que todo el proceso sea legal y ventajoso para ti.

Conclusión

Vender una vivienda es un proceso que requiere planificación, conocimiento del mercado y una correcta estrategia. Fijar un precio adecuado, cuidar la presentación y contar con un asesoramiento profesional son pasos fundamentales para garantizar una venta exitosa. Evitar estos tres errores comunes te permitirá agilizar el proceso y obtener el mejor beneficio por tu propiedad. Si tienes alguna duda o necesitas asesoramiento personalizado para vender tu vivienda, no dudes en contactarme. ¡Estoy aquí para ayudarte a cerrar la mejor operación!


Una primera buena impresión es más importante de lo que piensas.

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